Frente al aumento de fenómenos climáticos extremos y a los impactos de largo plazo como el incremento del nivel del mar, el sector financiero empieza a encontrar caminos concretos para responder. Una nueva guía elaborada bajo los Principios de Banca Responsable (PRB) ofrece a los bancos un marco práctico para integrar la adaptación y la resiliencia climática en sus estrategias y operaciones diarias.
El informe de UNEP-FI, titulado “Practical Guidance on Implementing Adaptation and Resilience for Banks”, busca convertir un desafío global en una oportunidad para el sistema financiero. Propone a las entidades no solo reducir su propia exposición al riesgo, sino también acompañar a empresas, comunidades y sectores económicos en el fortalecimiento de sus capacidades de resiliencia.
La propuesta se apoya en tres ejes:
- Estrategia: identificar cómo los riesgos físicos del clima y las oportunidades de resiliencia afectan la cartera de negocios.
- Evaluación: diseñar un plan de gestión y de inversión en soluciones de adaptación.
- Acción: poner en marcha la estrategia mediante políticas internas, gobernanza y, sobre todo, diálogo con los clientes.
Para facilitar el proceso, el documento sugiere un avance gradual. Desde los primeros pasos —como reconocer riesgos básicos— hasta prácticas avanzadas en las que la resiliencia se incorpora como parte integral de la toma de decisiones, cada banco puede elegir su nivel de ambición y crecer a partir de allí.
Además, ofrece ejemplos aplicados en sectores especialmente vulnerables como el inmobiliario y el agroalimentario, con recomendaciones que luego pueden adaptarse a otras industrias. El enfoque se complementa con un principio clave: las estrategias deben revisarse de manera constante, aprendiendo de la experiencia y actualizándose a medida que surgen nuevas herramientas y datos.
El lanzamiento de esta guía refleja un cambio de perspectiva en la banca: pasar de ver el cambio climático solo como un riesgo, a reconocerlo también como una oportunidad para innovar, generar confianza con los clientes y movilizar capital hacia soluciones que fortalezcan la resiliencia de toda la economía.
