¿Qué significa realmente tener un propósito como empresa? ¿Cómo pueden las marcas asegurar que sus valores se traduzcan en un impacto tangible y duradero? A medida que crecen las expectativas de los consumidores y las comunidades, muchas compañías se encuentran en la encrucijada de tener que demostrar que sus principios son algo más que palabras. El nuevo Libro Blanco de HAVAS Red, “(Re)Defining Purpose: Shifting from Ideas to Impact” aborda estos desafíos, ofreciendo una guía para que las organizaciones conviertan sus intenciones en acciones concretas y para que generen un cambio real y significativo.
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El Libro Blanco, que reúne la experiencia de cinco años de investigación en propósito corporativo, se basa en entrevistas con líderes de distintas industrias y expone cómo las empresas pueden evolucionar su propósito en cinco dimensiones clave. Estas prácticas no solo responden a la demanda actual de autenticidad y transparencia, sino que proporcionan herramientas para que las empresas desarrollen una relación más cercana y genuina con sus grupos de interés. Los principios buscan que las empresas no solo persigan ideales elevados, sino que se comprometan a actuar en consecuencia, adaptándose a las demandas de sus audiencias y construyendo relaciones de confianza.
Las cinco claves para transformar el propósito en impacto según HAVAS Red son:
- Un propósito como guía, pero con flexibilidad para adaptarse al cambio. El informe recomienda que las empresas definan un propósito claro y auténtico que les sirva de “norte” en su camino. Sin embargo, este propósito debe tener la flexibilidad necesaria para ajustarse a los cambios sociales y las expectativas de los stakeholders, permitiendo que las empresas evolucionen sin perder el rumbo.
- La autenticidad impulsa el compromiso verdadero. Para que las acciones de una empresa sean efectivas y generen confianza, deben estar alineadas con sus valores. HAVAS Red subraya que este principio de autenticidad requiere una actuación coherente, en la que se dé voz a diversas perspectivas y se demuestre un compromiso genuino con cada decisión. Este tipo de transparencia es clave para construir relaciones de confianza a largo plazo.
- Poner a las personas en el centro de la estrategia. El informe destaca que, para generar conexiones sólidas y duraderas, las empresas deben adoptar un enfoque centrado en las personas, adaptándose a las necesidades locales y fomentando un compromiso en todos los niveles de la organización. Este enfoque “personas primero” se traduce en iniciativas que son significativas no solo para los empleados, sino también para las comunidades.
- De la reacción a la reflexión: construir una agilidad auténtica. Para lograr una relación sólida con sus grupos de interés, HAVAS Red sugiere que las empresas se enfoquen en un compromiso reflexivo y basado en sus valores, en lugar de responder solo de manera reactiva. Este enfoque permite a las empresas anticiparse a los desafíos y adaptar sus estrategias de manera ágil, fortaleciendo su capacidad para actuar de forma coherente con su propósito.
- Alinear el propósito con la rentabilidad. Lejos de ser conceptos opuestos, el propósito y la rentabilidad pueden y deben trabajar en conjunto. El informe enfatiza que la alineación entre ambos permite que las empresas inviertan en iniciativas significativas y sostenibles, siempre que se mantengan métricas claras de evaluación y transparencia. Así, la empresa puede crear valor mientras refuerza su credibilidad y sostenibilidad a largo plazo.
Un enfoque evolutivo para el propósito
El Libro Blanco de HAVAS Red pone de manifiesto que el propósito debe ser una guía flexible, fundamentada en la autenticidad y la conexión con la realidad social. En un mundo donde la confianza y la transparencia son esenciales, las empresas que adopten estos principios estarán mejor preparadas para enfrentar las expectativas de un público que exige no solo palabras, sino acciones concretas y medibles.
Según los autores, este enfoque integral ofrece a las empresas un modelo de cómo pueden hacer del propósito un verdadero motor de impacto, adaptándose y evolucionando a medida que las necesidades y expectativas cambian.