General Motors (GM) ha acordado retirar aproximadamente 50 millones de toneladas métricas de créditos de gases de efecto invernadero para resolver el problema de emisiones excesivas de dióxido de carbono (CO2) en 5,9 millones de vehículos. Este acuerdo se deriva de una investigación de la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. (EPA) que identificó las emisiones excesivas en modelos de vehículos GM del año 2012 al 2018.
La EPA, en su programa de pruebas de vehículos ligeros en uso, detectó que ciertos vehículos de GM emitían en promedio más del 10 por ciento de CO2 de lo que los informes iniciales de cumplimiento de gases de efecto invernadero (GHG) de GM habían indicado. Los estándares de vehículos ligeros de la EPA están diseñados para asegurar que los vehículos en circulación cumplan con el rendimiento de emisiones declarado por los fabricantes durante el proceso de certificación de la EPA. Los fabricantes de automóviles deben probar los vehículos después de un año de uso y nuevamente a los cuatro años, y enviar esos resultados a la EPA, que también realiza sus propias pruebas para verificar el cumplimiento de los estándares de emisiones.
“Los estándares de vehículos de la EPA dependen de una supervisión estricta para ofrecer beneficios reales para la salud pública”, afirmó el administrador de la EPA, Michael S. Regan. “Nuestra investigación ha logrado responsabilidad y mantiene un programa importante que reduce la contaminación del aire y protege a las comunidades en todo el país”.
La acción involucra aproximadamente 4,6 millones de camionetas y SUV de tamaño completo, así como 1,3 millones de SUV de tamaño mediano, todos ellos modelos de los años 2012 a 2018. La lista de vehículos afectados está disponible en el sitio web de la EPA.
La retirada de créditos de GM se reflejará en la próxima actualización del Informe de Tendencias Automotrices y Cumplimiento de GHG, que estará disponible próximamente en la web de tendencias automotrices de la EPA.
