El International Sustainability Standards Board (ISSB) anunció en su simposio anual celebrado en Londres una nueva iniciativa para consolidar el rol de sus estándares como un “pasaporte global” de información en sostenibilidad. El objetivo es que los reportes elaborados bajo las normas del ISSB sean aceptados por múltiples jurisdicciones, reduciendo la fragmentación regulatoria y los costos de cumplimiento para las empresas que operan en distintos mercados.

Durante su discurso de apertura, el presidente del ISSB, Emmanuel Faber, comunicó la expansión del Jurisdictional Adopters Working Group, un grupo de trabajo que reunirá a reguladores de más de 45 países para avanzar en la adopción coordinada de los estándares. Actualmente, cerca de 40 jurisdicciones ya han expresado su intención de utilizarlos como referencia para sus requerimientos de divulgación en sostenibilidad.
La propuesta de “passporting” busca que los informes presentados conforme a los estándares del ISSB sean reconocidos internacionalmente, con la posibilidad de incorporar ajustes específicos a cada país. Según el organismo, esta medida permitirá reducir fricciones entre sistemas nacionales, aportar comparabilidad a los mercados de capitales y aumentar la eficiencia de las empresas al reportar información ambiental, social y de gobernanza (ESG).
En el encuentro también se presentó la nueva Jurisdictional Rationale Guide, una guía que detalla las motivaciones y beneficios que han llevado a los países a adoptar los estándares, entre ellos fortalecer los mercados financieros y mejorar la toma de decisiones de inversión. Además, se dio a conocer una herramienta complementaria.
Faber destacó que los estándares del ISSB ya cubren cerca del 40% de los mercados de capitales globales y subrayó el compromiso del organismo con “maximizar los beneficios de un lenguaje común en sostenibilidad para empresas, reguladores e inversores”.


